China ocultó y exportó el coronavirus

Lo que la dictadura china ha hecho es un atentado contra la humanidad. Escondieron información, destruyeron muestras, frenaron pruebas, negaron durante semanas lo que ya sabían.

Es en una dictadura, donde callan a quien quieren, donde no hay libertad, que un virus que se pudo controlar a tiempo fue ocultado hasta que ya el mundo entero estaba en peligro. (Reuters)

El virus que está matando gente en el mundo entero es un virus chino. Es en una dictadura, donde callan a quien quieren, donde no hay libertad, que un virus que se pudo controlar a tiempo fue ocultado hasta que ya el mundo entero estaba en peligro.

La dictadura china tenía en sus manos la posibilidad de salvar a miles de personas, de los suyos y del mundo entero, pero lo que decidió hacer —cuando era el momento adecuado— fue destruir muestras, frenar las pruebas y, sobre todo, ocultar lo que estaba ocurriendo.

En diciembre de 2019 los laboratorios chinos tenían identificado el nuevo virus altamente infeccioso que ya causaba estragos en China, la dictadura impidió que los científicos hicieran lo correcto: alertar al mundo, dar la información que tenían y con eso permitir que científicos y expertos del mundo empezaran rápidamente a trabajar en una vacuna y en las medidas necesarias para frenar la propagación.

En Wuhan, donde se inició el brote, la dictadura ordenó destruir las muestras de laboratorio que explicaban la causa de la neumonía viral que sufrían los habitantes del lugar para los primeros días de enero. Fue casi un mes después cuando por fin reconocieron que lo que ocurría era una transmisión de persona a persona.

Esas semanas en las que la dictadura china ocultó todo eran la clave para evitar la pandemia que hoy mata a gente en todo el mundo. Durante todo enero las autoridades en China negaron que lo que ocurría fuera un caso de transmisión persona a persona.

Hay que hacer énfasis en que la dictadura china es tan brutal y malévola que hizo lo necesario para callar incluso a aquellos médicos y científicos héroes que desafiando las ordenes empezaron a alertar al mundo de la gravedad del asunto.

Hoy tal vez la historia más conocida es la del doctor Li Wenliang. A finales de diciembre el doctor del Hospital Central de Wuhan empezó a advertir a sus compañeros de la escuela de medicina sobre un nuevo virus contagioso que se parecía al mortal SARS que a principios del 2000 se esparció desde China a diferentes países y dejó cientos de muertos.

Gracias al Dr. Li la noticia del virus empezó a difundirse, inmediatamente fue arrestado por la dictadura. Después de unos días fue liberado, no sin antes obligarle a firmar un documento en el que debió aceptar que había cometido un acto ilegal al hacer «declaraciones falsas» en las redes sociales y en el que se comprometía a «reflexionar seriamente» sobre sus «errores».

Después de haber humillado públicamente al Dr. Li, la policía de Wuhan habló en la televisión estatal china para advertir a la población sobre los peligros de «difundir rumores». Y desde ese día, durante varias semanas, en todos los medios estatales se pedía a los chinos no creer en los rumores que circulaban en internet.

Después de ser liberado el Dr. Li volvió a atender en los hospitales de Wuhan llenos de enfermos de coronavirus, fue contagiado y murió a los 34 años dejando una esposa embarazada y un pequeño hijo. Hoy debe ser recordado como un héroe que fue perseguido y silenciado por una dictadura a la que no le importa poner en riesgo a su gente y al mundo entero.

Como el Dr. Li, otros médicos fueron perseguidos y silenciados. Por ejemplo, el 1 de enero la Oficina de Seguridad Pública de Wuhan interviene para interrogar a ocho médicos que publicaron información sobre la enfermedad en WeChat.

La dictadura china incluso promovió el banquete chino del Año Nuevo Lunar que se celebra a finales de enero y donde millones de personas hacen tránsito por todo el país visitando a sus familiares. Las autoridades ya sabían hace semanas que lo que ocurría era un virus altamente contagioso y que muchas personas se infectarían en la celebración de esa fiesta.

El 23 de enero, como denuncia Wall Street Journal, aproximadamente 5 millones de personas abandonaron Wuhan sin ser examinadas por la enfermedad.

Incluso hoy, ciudadanos chinos prominentes que critican la respuesta del gobierno desaparecen repentinamente.

Lo que la dictadura china ha hecho es un atentado contra la humanidad. Escondieron información, destruyeron muestras, frenaron pruebas, negaron durante semanas lo que ya sabían: un virus estaba matando a la gente. Pero no solo ocultaron lo que ocurría sino que no tomaron ninguna medida para evitar que el mortal virus se esparciera por el mundo entero.

Un estudio publicado en marzo concluyó que si la dictadura china hubiera actuado tres semanas antes, tomando las medidas adecuadas, previniendo y aislando a los infectados, la cantidad de casos de contagio podría haberse reducido en un 95% y su extensión geográfica se habría limitado.

Increíblemente, después de todo esto, China se presenta al mundo como un ejemplo de efectividad en el manejo de la enfermedad y ofrece ayuda a otros países para enfrentar el virus. Incluso aseguran que han encontrado la vacuna para el coronavirus.

Lo que falta ahora es que nos creamos el cuento de que China es ejemplo de algo y lo pongamos como el héroe que construía hospitales en días y luego desarrolló primero que EE. UU. una vacuna.

Que quede claro: de China salió el coronavirus —igual que el SARS—, China frenó las pruebas, destruyó las muestras, ocultó información durante semanas y, sabiendo lo peligroso que era el virus, no hizo absolutamente nada para prevenir el contagio en otros países. China propagó el virus.

Ahora nuestros países intentan, como pueden, sobrellevar esta tragedia. Las fuerzas y energías deben estar puestas en salvar vidas y en mirar cómo enfrentar la terrible crisis económica que viene, pero llegará el momento en que superemos esto y ahí debemos exigir respuestas a la dictadura China por lo que ha hecho.

Por ahora, debemos tener claro que China no es modelo de nada y que el coronavirus es un virus chino.

Fuente: https://es.panampost.com/vanessa-araujo/2020/03/19/china-oculto-y-exporto-el-coronavirus/

Rebelión chilena: ni espontánea ni transversal – Por Agustín Laje

El ataque a las instituciones chilenas es un ataque esencialmente de tipo izquierdista.

En América Latina acostumbramos a equiparar crisis económicas con crisis políticas, en el sentido general de que las primeras desencadenan las segundas. Por eso la propia noción de crisis nos remite, casi automáticamente, a gráficos y números; a complejos cálculos que un desfile de economistas tratan de resumir por televisión; a inflación, desabastecimiento, corridas bancarias, desempleo, pobreza. Esa, pues, es la fisonomía de una crisis en el imaginario colectivo latinoamericano.

Ahora bien, nada de eso ocurre realmente en Chile, sencillamente porque la crisis no es económica, sino estrictamente política e ideológica. Y esto debe ser tenido en cuenta a partir de las variables macroeconómicas que posicionan, no por nada, a Chile como el país más desarrollado de la región gracias al modelo que hoy precisamente se impugna: crecimiento promedio anual del 3,7 % en las tres últimas décadas, incremento del PIB per cápita de 4.000 a 28.000 dólares en las últimas cuatro décadas, reducción de la pobreza del 53 % al 6 % en ese mismo lapso, inflación actual virtualmente inapreciable, una movilidad social envidiable, caída del coeficiente de Gini desde los ’80 a hoy, etcétera.

Si en nuestro imaginario colectivo son las crisis económicas las que desatan las crisis políticas, ¿en qué medida una crisis política se desata si no es a través de una crisis económica? Fundamentalmente, a través de una crisis de legitimidad respecto de la totalidad del sistema. Y estas son, sin dudas, las crisis más corrosivas, porque no se solucionan con un nuevo plan económico o con una reforma puntual, sino con una reestructuración radical, o bien de las expectativas sociales respecto de esa totalidad, o bien con el derrumbamiento de la totalidad como paso previo para rearmar un nuevo sistema: y a eso es lo que llamamos, desde luego, revolución.

¿Hay una revolución, pues, en Chile? No en sentido estricto. Por ahora hay insurgencia y rebelión. La revolución es el paso siguiente, en el que las grietas del sistema interpelado se ensanchan de tal manera que toda la estructura termina de caer. Y eso, por el momento, no ha pasado. En términos marxistas, podríamos decir que lo que hoy vemos en Chile todavía acontece al nivel de la superestructura política, jurídica, cultural e ideológica, pero que está apuntando a dar un salto cualitativo hacia la estructura económica como fin último.

La peculiaridad de la actividad revolucionaria al nivel cultural es que demora en brindar frutos lo que demoran las generaciones en adoctrinarse. Y en Chile, claro está, la izquierda domina el sistema cultural (escuelas, universidades, medios de comunicación y farándula) desde hace muchos años ya. Personalmente, he dictado conferencias en colegios donde hacía algunos días habían estado enseñando las ideas de Antonio Gramsci dirigentes comunistas como Boric y Jackson, quienes a su vez han sido formados por Mouffe y Laclau en recurrentes visitas de estos a Chile. Estoy hablando, en el caso que me tocó vivenciar, de un colegio de clase alta del sur del país. Y personalmente, también, me tocó vivir al menos tres actos de censura en universidades chilenas, que cancelaron mis conferencias con menos de 24 horas de antelación.

Entiéndase lo que se quiere decir: si se advierte la composición sociocultural de los manifestantes chilenos, podrá advertirse que no estamos, en efecto, frente a una revolución proletaria ni mucho menos. Es el estudiantado de clase media, media alta y alta el que protagoniza la revuelta. Y la revuelta no es el fruto de crisis económica alguna, sino de una crisis de legitimidad del sistema que hizo de Chile el país más próspero de la región, que viene siendo cuidadosamente trabajada desde hace muchos años en aquellos que, por fin, están listos para salir al campo de batalla.

Ahora bien, la crisis política chilena no es simplemente una crisis de legitimidad, sino que además es el producto de un contexto político internacional bien preciso, en un momento en el que la izquierda populista se rearma en la región tras el punto de inflexión que significó la victoria de AMLO en México y el armado del llamado Grupo de Puebla.

Al respecto, existe una tendencia tan estúpida como infantil de considerar que toda variable geopolítica es parte de una “teoría de la conspiración”. Y es que la política no tiene que ver simplemente con urnas, votos, discursos y partidos políticos: esto es, en todo caso, lo que se ve de la política. Pero hay una dimensión de la política (quizás la más política de sus dimensiones) que no se coloca a la luz del día: servicios de inteligencia, infiltraciones, interceptaciones, carpetas reservadas, etcétera.

El éxito de la revuelta chilena descansa, precisamente, en su apariencia de “espontaneidad”. Sustraído de toda conexión política-internacional, de toda evaluación de intereses foráneos, de toda determinación de relaciones de fuerzas entre naciones, el conflicto chileno se define a sí mismo como la autodeterminación de un “pueblo” que “transversalmente” decidió “decir basta” (sin saber muy bien a qué). En otras palabras, el éxito de la revuelta descansa en la imbecilidad colectiva que gusta de épicas de cartón diseñadas para imbéciles.

“Vamos mejor de lo que pensábamos. Y todavía lo que falta. Estamos cumpliendo el plan. Foro de San Pablo, estamos cumpliendo el plan, ustedes me entienden”, decía Nicolás Maduro al ser señalado como responsable de la violencia en Ecuador y en Chile. Diosdado Cabello, por su parte, hablaba de la “brisa bolivariana que recorre la región”. Por eso mismo el Comunicado de la Secretaría General de la OEA del 16 de octubre de este año, que decía expresamente que “las actuales corrientes de desestabilización de los sistemas políticos del continente tienen su origen en la estrategia de las dictaduras bolivarianas y cubana, que buscan de nuevo reposicionarse”.

¿No entran a diario cientos de venezolanos a Chile, que huyen de la pobreza de su país? ¿Cuán difícil es meter venezolanos con “otro tipo” de intereses? ¿E incluso cubanos? ¿O acaso no son las fronteras chilenas tan porosas como Bachelet las dejó? Llegan, además, refuerzos de otros países. Los dirigentes del Frente de Izquierda de Argentina, Gabriel Solano y Romina Del Pla, por ejemplo, anunciaron en sus redes sociales que estaban viajando ahora mismo a Chile “para apoyar la rebelión del pueblo chileno”. Y a ello hay que sumar el movimiento indígena organizado, los grupos feministas, los lobbies LGBT y todos los movimientos sociales que la izquierda, con gran astucia, ha estado formando durante décadas a partir de la teoría de la hegemonía laclauniana.

Porque en esto hay que ser bien claro. El ataque a las instituciones chilenas es un ataque esencialmente de tipo izquierdista. Desde luego que los idiotas útiles abundan, y parte del éxito de la presunta “transversalidad” y “espontaneidad” alegada reside precisamente en atraer como con un imán a personas que no saben lo que hacen, pero lo hacen de todas maneras. Así, lo único espontáneo del caso chileno, en todo caso, es la ingenuidad de quienes pensando que efectivamente aquello es espontáneo, se suben a un tren que va marchando hacia una dirección totalmente preestablecida, pero que ellos, los ingenuos funcionales, por supuesto desconocen.

¿Y cuál es esa dirección? Todo indica que una nueva Constitución, hecha a la medida de los intereses del socialismo, que eche por tierra aquellos principios fundamentales que hicieron de Chile un país rico y próspero. Por ello las reformas económicas estatistas y los cambios ministeriales que cobardemente llevó adelante Sebastián Piñera como concesión a los delincuentes callejeros no sirvieron de nada, y las manifestaciones inmediatamente después se reanudaron. Porque lo que se ha impugnado es la totalidad del sistema, y la Constitución es el reflejo de la arquitectura política de esa totalidad.

La “centro-derecha” está pagando muy caro no haber entendido la cultura como campo de combate, y la política como realización efectiva de algo más que un gráfico de barras o una planilla de Excel. Y en este sentido, la izquierda lleva años jugando sola, metiendo goles en un arco sin ningún portero.

Nota publicada en: https://es.panampost.com/agustin-laje/2019/10/29/rebelion-chile-espontanea/

“Hay un proceso de desestabilización en América Latina con injerencia venezolana-cubana”

El candidato a vicepresidente por Juntos por el Cambio denunció una clara maniobra internacional “en cadena” detrás de las protestas en Chile que hasta ahora dejaron un saldo de 15 muertos.

El candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio, Miguel Ángel Pichetto, aseguró este martes que existe una estrategia de desestabilización internacional del dictador Nicolás Maduro, con ayuda de Cuba, detrás de las protestas que se están produciendo en Chile, que ya dejaron 15 muertos.

Hay un proceso de desestabilización en la región con injerencia venezolana-cubana”, denunció Pichetto y aseguró que “la dictadura militar en Venezuela, en sociedad con Cuba, está avanzando en otros países de Latinoamérica”.

Pichetto manifestó su preocupación por los dichos de Diosdado Cabello, el número dos del régimen de Nicolás Maduro, quien confesó estar contento por «la brisa bolivariana que recorre la región”.

Pichetto manifestó su preocupación por los dichos de Diosdado Cabello, el número dos del régimen de Nicolás Maduro, quien confesó estar contento por «la brisa bolivariana que recorre la región”.

Lo que está pasando en Chile, el motivo es algo muy nimio, sin embargo ha derivado en desórdenes de envergadura”, dijo y advirtió que fue significativo lo que pasó ayer en el consulado de Chile en Argentina.

«Hay un tufillo cubano en la Argentina que se percibe en distintos lugares de Latinoamérica y que hay procesos organizados de cierta desestabilización. Hay que seguir atentamente algunos discursos de Cabello y Maduro. Inducen a pensar en un acontecimiento en cadena y organizado”, alertó.

Para Pichetto, «hay hechos que requieren frente al proceso de esta dictadura en Venezuela una definición política de los candidatos a presidente que sea categórica. Estamos frente a una dictadura militar que está en sociedad con Cuba y que están avanzando en procesos de desestabilización en otros países latinoamericanos”.

Fuente: https://www.infobae.com/politica/2019/10/22/miguel-angel-pichetto-hay-un-proceso-de-desestabilizacion-en-america-latina-con-injerencia-venezolana-cubana/?utm_medium=Echobox&utm_source=Facebook&fbclid=IwAR2ke2su4T-dF7fFPgqPZ65GG78SYFd7R2YYJtvek28honIoZR-F79gt61c#Echobox=1571747323

China, Rusia, Irán y Cuba están contribuyendo a la inestabilidad de América Latina

China, Rusia, Irán y Cuba plantean problemas de seguridad en América Latina, dice Craig S. Faller, almirante de la Marina de los EE. UU. Analizaremos cuáles son las amenazas de estos países. Producido por @LaGranÉpoca

La ultra-izquierda está propiciando un golpe de estado en Chile

A través de acusación constitucional, que requiere de mayoría simple de diputados en ejercicio, la izquierda Chilena desea cesar en el cargo a Sebastián Piñera (presidente de Chile) hasta resolución de la misma por el senado, asumiendo como presidente interino, el senador Quintana como presidente de la cámara alta. Un análisis:

Los que defienden el régimen del chavismo y castro-chavismo están articulando un golpe de estado no solo en Chile, sino que en toda Latinoamérica.

Suiza es ‘gayfriendly’ pero aumentaron las tasas de suicidio LGBT

Altas tasas de suicidios LGBT en Suiza se dan a pesar de múltiples organizaciones de apoyo y de gozar de una gran aceptación de homosexuales en la sociedad.

tasas de suicidio lgbt en suiza

El número de suicidios entre personas LGBT en Suiza está sonando campanas de alarma. Organizaciones locales de activistas han descrito el estado de salud mental entre los jóvenes suicidas LGBTI como en crisis.

Las tasas de suicidio entre los jóvenes LGBTQ son de dos a cinco veces más altas, en comparación con el resto de la población suiza.

Alrededor del 50% de los intentos de suicidio entre hombres homosexuales tienen lugar antes de los 20 años de edad, que a su vez representa un 74% para las mujeres lesbianas jóvenes.

Las cifras arrojan datos críticos, pues Suiza es uno de los países con mayor aceptación de personas LGBT en su del sociedad y también uno de los más desarrollados.

Por ejemplo, Suiza llegó a los titulares recientemente cuando criminalizó la homofobia, pero las personas LGBTI en dicho país argumentan que el país aún detrás de sus vecinos europeos.

También según su constitución, en el artículo 8, hay protección que cubre a este tipo de personas haciendo especial énfasis en la igualdad ante la ley y la «forma de vivir». En general la sociedad suiza es sana respecto a la actitud y derechos de estas minorías.

Las personas LGBT en Suiza gozan de una amplia aceptación, según los datos de Pew Research, la homosexualidad y la unión igualitaria de forma civil no es un problema en el país.

matrimonio gay en suiza

¿La homofobia causa el suicidio? según los datos y la evidencia la respuesta es contundente: NO. Lo que se alinea con otro estudio publicado en Suecia, que también se considera como ‘gay-friendly’ y donde las tasas de suicidio de personas homosexuales va en aumento.

Fuente: https://maslibertad.com.co

Noruega aprueba la primera restricción del aborto en cuarenta años

El Gobierno de centroderecha hizo valer en el parlamento su mayoría absoluta y contó además con el respaldo de diputados del opositor Partido Centrista.

Esta contrareforma del aborto es uno de los puntos incluidos en el acuerdo anunciado en febrero para ampliar el gobierno de la conservadora Erna Solberg con una formación más, el Partido Democristiano, que pretendía introducir medidas aún más restrictivas contra el aborto.

Noruega fue uno de los países que desarrolló la legislación del aborto en los años setenta y junto a Suecia y Dinamarca encarnó el modelo de una Europa desarrollada y socialmente equilibrada.

La reforma del aborto ahora introducida estipula que las mujeres estipula que las mujeres que esperan partos múltiples deben declarar en el futuro una razón válida para que se extraiga uno o más fetos. Será una comisión la que decida.

Fuente: https://es.euronews.com/2019/06/14/noruega-aprueba-la-primera-restriccion-del-aborto-en-cuarenta-anos?fbclid=IwAR2MidZsuf_fOWCwGKJ5mypw6kqFlye_j1j9g86hMp4WOM8F6VDs2kKsqO8

Pareja de lesbianas asesina a golpes a niño porque se negaba a vestirse de mujer

Imagen referencial. Foto: Pixabay / Dominio público.
Imagen referencial. Foto: Pixabay / Dominio público.

Una pareja de lesbianas maltrataba constantemente al hijo de una de ellas, hasta que lo mataron a golpes por no aceptar vestirse de mujer.

El crimen se cometió en marzo de este año en el municipio de Juventino Rosas, en el estado mexicano de Guanajuato. El menor fue identificado como Karol Ramón, de 7 años.

Según reveló Televisa News este 14 de junio, el menor era golpeado constantemente hasta con un martillo, un látigo y una silla, y la pareja de lesbianas pasaba días sin alimentarlo.

El diario mexicano Tabasco Hoy señaló que las dos lesbianas “terminaron por propinarle una brutal golpiza, luego de que el niño se negara a vestirse con prendas que son para niña”.

En diálogo con ACI Prensa, Marcial Padilla, director de Conciencia y Participación (ConParticipación), señaló que “este caso nos refleja lo que llega a hacer la ideología de género en algunas personas”.

Padilla precisó que “las personas homosexuales y las mujeres lesbianas no están representadas en este acto”, sino que “lo que hace esto es mostrar cómo la ideología de género puede llegar a envenenar la mente y el corazón de algunas personas, olvidándose de los más elemental, el amor a un hijo”.

El director de ConParticipación subrayó la necesidad de “tomar conciencia y detener la ideología de género, que está dañando a todos, a los niños y en este caso llegó incluso a quitarle la vida”.

Por su parte, el P. Hugo Valdemar, canónigo penitenciario de la Arquidiócesis de México, expresó su “gran horror por un hecho tan monstruoso, y de gran dolor por el sufrimiento de la víctima inocente que sistemáticamente era maltratada”.

“Que un niño sea asesinado por sus propios padres es tan atroz como el aborto, donde sucede lo mismo aunque no cause el mismo impacto. Es un hecho horrendo y diabólico”, dijo.

Para el sacerdote mexicano, en un crimen tan atroz “está el resultado de la nefasta ideología de género, una ideología que se disfraza de búsqueda de la tolerancia cuando en realidad se trata de una verdadera dictadura ideológica”.

“Es un pensamiento que pretende ser único e impuesto por la fuerza,  como en las peores dictaduras”, dijo.

El P. Valdemar aseguró que “tan condenables” son los crímenes de parejas homosexuales como aquellos cometidos por heterosexuales, pero precisó que “aquí hay un crimen de odio ideológico: se asesina a un niño por negarse a asumir una conducta antinatural”.

“Podemos decir que es una víctima inocente de la diabólica ideología de género que ahora el partido Morena y la Secretaría de Educación Pública quieren imponer en las escuelas de México. Los padres de familia no lo deben permitir”, expresó.

Fuente: Aci Prensa

El aborto legal y seguro no avanza -y retrocede- en América

En Estados Unidos se están dando pasos hacia atrás en materia de aborto. Y en otros cuatro países del continente no importa si te violaron, si eres pobre, si tu vida está en peligro, o si tienes 13 años, las únicas alternativas son ser madre o ir a la cárcel.

El aborto legal y seguro no avanza -y retrocede- en América

De los 36 países (35 naciones autónomas y Puerto Rico -un estado libre asociado-) que componen el continente americano sólo 6 tienen leyes que permiten y garantizan el aborto voluntario, seguro y gratuito. En Estados Unidos, Canadá, Cuba, Puerto Rico, Guyana y Uruguay se lograron avances en materia de despenalización del aborto. Sin embargo, las decisiones recientes de los cuerpos legislativos en América parecen dar pasos en sentido contrario.

El 15 de mayo pasado el estado de Alabama aprobó una ley que prohíbe el aborto aun cuando el embarazo es producto de una violación o incesto, además de otorgar condenas de hasta 99 años de prisión a los médicos que practiquen un aborto. En Luisiana el 29 de mayo se aprobó otra ley que restringe el derecho a abortar hasta la sexta semana de gestación. Estas legislaciones del 2019 contradicen la ley federal existente en Estados Unidos que desde 1973 —conocida como Roe vs. Wade— otorgó a las mujeres el derecho a abortar voluntariamente durante el primer trimestre del embarazo. Parece que los pasos se están dando hacia atrás. 

En donde se logró avanzar, se retrocede y en el resto del continente las cosas permanecen igual. En algunos países el aborto es permitido sólo si la vida de la madre esté en peligro, en otros si la madre fue violada y en algunos más si la madre presenta escasas oportunidades económicas. Pero en algunos otros no importa si te violaron, si eres pobre, si tu vida está en peligro, o si tienes 13 años, las únicas alternativas son ser madre o ir a la cárcel.

Fuente: https://www.eleconomista.com.mx

El Orgullo Gay en Disneyland: van a por tus hijos

Los ideólogos de género captaron el potencial pedagógico de Disney y tomaron la decisión de conquistarla para ponerla al servicio de la causa LGTBI. 227.000 personas han escrito -en apenas tres días- a los directivos de disney para que cancelen el ‘Día del Orgullo Gay’ en su parque de París.

Disney celebra su primer desfile LGTBI en su parque de atracciones de París.
Disney celebra su primer desfile LGTBI en su parque de atracciones de París.

Como millones de personas en cientos de países, desde hace tres generaciones, servidora ha crecido y se ha educado con las películas y los personajes en comic de Walt Disney. Desde ‘Bambi’ a ‘La Bella y la Bestia’ pasando por ‘El libro de la selva’, ‘Blancanieves’, ‘La Dama y el Vagabundo, ‘101 Dálmatas’ o ‘La Cenicienta’. He devorado desde mi infancia los cuentos del Pato Donald y Mickey Mouse y no ha habido Navidad -al menos durante los primeros diez años de mi vida- en los que no haya disfrutado del correspondiente estreno de película de Walt Disney. También de mayor me lo he pasado muy bien llevando a los niños de mi familia al cine para contemplar cómo se emocionaban, lloraban y reían con las historias de sus personajes. Confieso que hay escenas de películas de Disney que podría recitar de memoria.

Y es que los herederos de Walt Disney has creado cultura, sin dudaEs la multinacional del entretenimiento familiar más importante del mundo, un verdadero imperio con espectadores y seguidores en todos los continentes. Su poder de comunicación y transmisión de valores es evidente. Con la recuperación de clásicos -una habilidad de los creativos de Disney- millones de niños aprendieron que “la belleza está en el interior” (‘La Bella y la Bestia’), que no había que mentir (‘Pinocho’), que la amistad lo podía todo (‘El libro de la selva’), que la bondad era capaz de conquistar a los pequeños gruñones (‘Blancanieves’) y que en la vida hay que sobreponerse a las adversidades y asumir responsabilidades (‘Bambi’).

En eso estábamos cuando los ideólogos de género captaron el potencial pedagógico de la compañía Walt Disney y tomaron la decisión de conquistarla para ponerla al servicio de la causa LGTBI. Presionaron para convertir en lesbiana a la princesa de ‘Frozen’ y están a punto de lanzar su primera serie juvenil de temática homosexual. Y esta misma semana tienen previsto organizar el primer ‘Día del Orgullo Gay’ en Disneyland París, hecho que -gracias a HazteOir.org y CitizenGO- ha desencadenado una movilización mundial sin precedentes. Cuando escribo estas líneas, 227.000 personas han escrito -en apenas tres días- a los directivos de la empresa estadounidense para pedirles que cancelen el ‘Día del Orgullo Gay’ en su parque de atracciones de París.

“Me atrevo a preguntar a los directivos de Disney: ¿Llevarían a sus niños de seis años a un bar de ambiente homosexual del barrio madrileño de Chueca?”

En estos días he hablado con varias personas acerca de si era o no legítimo que en un espacio diseñado para el ocio y la diversión familiar, especialmente dirigido a los niños, se celebre el ‘Día del Orgullo Gay’. Una empresa privada -faltaría más-puede hacer en sus instalaciones lo que considere oportuno. Pero si recibe presiones de los activistas LGTBI para introducir ideología de género en sus personajes, actividades y espacios recreativos, también puede atender peticiones ciudadanas que le solicitan que siga siendo lo que siempre ha sido: un espacio de ocio para todos los públicos.

Ciertamente, como me comentaba la portavoz de HazteOir.org, Inmaculada Fernández (que entrega este viernes más de 227.000 firmas contra el desfile del ‘Orgullo Gay’ en Disneyland París’ en la sede de Disney en Madrid), lo que se trata de reivindicar públicamente son determinadas prácticas sexuales, vinculadas a una determinada orientación sexual, concretamente homosexual. ¿Es un parque de atracciones infantil el sitio más adecuado para que unos adultos hagan visible su orientación sexual? Y me atrevo a preguntar a los directivos de Disney: ¿Llevarían a sus niños de seis años a un bar de ambiente homosexual del barrio madrileño de Chueca?

“Pero ¿qué hacemos con los ‘niños gay’?”, me preguntaba una persona con evidente preocupación por los niños con determinada orientación sexual. “No hay niños gay”, me ha respondido Inmaculada Fernández (que sabe bastante de niños) “porque los niños están en pleno desarrollo biológico, psicológico, emocional y afectivo. No han determinado su identidad sexual. Hay que dejarles que sean niños, sin más”.  

De acuerdo. Entonces ¿qué lleva a los responsables de Disney a incluir el desfile del ‘Orgullo Gay’ en su programa de actividades del parque de atracciones? Sólo hay una respuesta: ceder a las presiones de los activistas LGTBI y promover el adoctrinamiento sexual entre los menores.

Si los directivos de la multinacional de origen estadounidense desatienden las peticiones de las más de 200.000 personas que les han solicitado que cancelen el desfile, se me ocurre que debemos pedirles que introduzcan en su programación una Marcha por la Vida reivindicando que millones de niños nunca podrán fotografiarse con Mickey Mouse ni con el Pato Donald porque el aborto provocado les ha segado la vida.

“Si Disney mantiene el desfile del ‘Orgullo Gay’ será cómplice del adoctrinamiento sexual LGTBI de menores. En sus manos está tomar la decisión”

Otra propuesta es que Disneyland celebre el ‘Día de la Familia Natural’ y reciba gratuitamente -por un día- a padres, madres y niños de todos los continentes para visibilizar la grandeza de esta institución milenaria que hace posible que sigan viniendo a este mundo bebés procreados por hombres y mujeres desafiando al pesimismo cultural que nos invade y llenan al mundo de esperanza.

Finalmente, los parques de atracciones podrían rendir homenaje a padres y madres en los días dedicados a ellos todos los años. En España, el primer domingo de mayo para las madres y el 19 de marzo para los padres. Preciosas escenas de personajes de cuento aplaudiendo a estos héroes de carne y hueso que traen niños -clientes reales o potenciales de Disney- al mundo, los alimentan, cuidan y educan hasta la edad adulta.

En definitiva. Si Disney mantiene el desfile del ‘Orgullo Gay’ será cómplice del adoctrinamiento sexual LGTBI de menores. En sus manos está tomar la decisión. Y si lo quiere mantener pero da entrada a la ‘Marcha por la Vida’, a la Familia Natural y al homenaje a Padres y Madres, pues dará una lección de pluralidad y tolerancia.

Atentos, pues, a la decisión de los jefes de Disneyland. Si optan únicamente por imponer a los niños una ideología determinada, tendrán el rechazo de cientos de miles de personas que se niegan a que los activistas LGTBI se quieran adueñar del alma de los niños y cuestionar su inocencia.

Fuente: https://www.actuall.com/criterio/familia/el-orgullo-gay-en-disneyland-van-a-por-tus-hijos/?fbclid=IwAR2xY-jcA7sajrDa5bjWvka947knGWQekTZDDEqjdcNK1PwMGmhoqxsTyAo