UN NUEVO ORDEN MUNDIAL

¿Será que Dios le presta atención a lo que sucede en nuestro planeta, o es un amo ausente que puso al planeta en movimiento mucho tiempo atrás y luego se olvidó de nosotros? El sueño de un antiguo rey prueba más allá de toda duda que la mano invisible de Dios aún está activa en la historia del mundo.

Daniel 2: 1-13 Cierta noche, Nabucodonosor, rey de la antigua Babilonia, tuvo un sueño perturbador que no pudo pasar por alto. Ansioso por saber cuál podría ser el significado, llamó a sus magos y astrólogos para que se lo explicaran. Pero había un detalle. No les contaría el contenido del sueño. “Quiero que me digan qué es lo que soñé, y que me digan entonces su significado. Si no lo hacen, les costará la vida”.

Obviamente, no pudieron hacerlo; por lo que Nabucodonosor dio la orden para que los sabios fueran prendidos y ejecutados.Lamentablemente, esa orden incluía a un joven hebreo cuyo nombre era Daniel, que había sido llevado en cautiverio a la corte del rey. Daniel pidió más tiempo (Daniel 2:14-16), a la vez que le prometía a Nabucodonosor que él le daría el contenido y la interpretación de su sueño.

Daniel 2:17-28 Daniel corrió al encuentro de sus amigos hebreos y dedicó un tiempo a orar con ellos, pidiéndole a Dios que les revelara el secreto del sueño de Nabucodonosor. Sabían que sólo Dios podía leerlos pensamientos de Nabucodonosor (Véase, por ejemplo, 1 Reyes8:39). Dios no le falló a Daniel, y le reveló tanto el contenido como la interpretación del sueño de Nabucodonosor. (Daniel 2:19) Al día siguiente, Daniel se presentó ante el rey y le explicó su sueño tal como se lo había prometido.

Daniel 2:31-35 En el sueño, Nabucodonosor había visto una gran estatua construida con varios metales: cabeza de oro, pecho y brazos de plata, vientre y muslos de bronce, piernas de hierro, y pies de hierro mezclado con barro. Luego, en el sueño, una piedra “no cortadacon manos humanas” (Daniel 2:34) impactaba sobre los pies de la imagen y la demolía por completo. Entonces el viento barría los trozos de la estatua, y la piedra crecía hasta llenar toda la tierra.

Daniel 2:36-45 ¿Cuál es el significado? Daniel explica el sueño con todo detalle. Comenzando con la cabeza de la estatua, cada uno delos metales sucesivos representa un imperio sucesivo. La cabeza de oro representa a Nabucodonosor y su imperio babilónico. “Tú eres la cabeza de oro”, dijo Daniel (Daniel 2:38) El poderoso imperio de Babilonia duró desde 605 a. C., aproximadamente, hasta 539 a. C.,cuando la ciudad fue demolida por el general persa Ciro.

El imperio Medo-Persa gobernó entonces desde 539 a. C. hasta 331 a. C., cuando los persas fueron vencidos por Alejandro Magno y los griegos, representados por el vientre y los muslos de bronce. Sin embargo, en 168 a. C., el imperio griego fue a su vez aplastado por los romanos, representados en el sueño de Nabucodonosor por las piernas de hierro.

Los romanos fueron el poder dominante en el mundo hasta 476 d. C. cuando las tribus bárbaras del Oeste de Europa y el Norte de África los pusieron finalmente de rodillas. El Imperio Romano de Occidente se desintegró formando diez divisiones,que están representadas por los pies y los diez dedos de la imagen. (Daniel usa los dedos para describir a un reino de hierro que fue dividido, Daniel 2: 41).

Esas tribus bárbaras se convirtieron en las naciones modernas de Europa Occidental con la excepción de tres, que se extinguieron:

Germanos: alemanes

Anglosajones: británicos

Visigodos: españoles

Lombardos: italianos

Francos: franceses

Hérulos: extintos

Suevos: portugueses

Vándalos: extintos

Burgundios: suizos

Ostrogodos: extintos

De acuerdo con el sueño, esas naciones de Europa Occidental tratarían de mezclarse “por medio de alianzas humanas” (Daniel 2:43), o de restablecer la unidad perdida con el colapso del Imperio Romano de Occidente.

La reunificación del Imperio Romano de Occidente es un sueño que ha fracasado muchísimas veces. Los monarcas europeos trataron de lograr la unidad por medio de los matrimonios cruzados. Todos ellos fallaron miserablemente. Carlos V trató de conquistar y unificar toda Europa,pero se vio forzado a abdicar al trono. Luis XIV de Francia también lo intentó. Y Napoleón. Y el Káiser. Y Hitler. Y todos fracasaron estrepitosamente porque el Dios de Daniel había dicho: “no se unirán el uno con el otro”.

Esas siete sencillas palabras proféticas han controlado el destino del mundo occidental por más de 1.500 años. Europa no se reunirá en el Imperio Romano de Occidente, porque Dios dijo que no lo haría. Los intentos actuales continúan fracasando. Lo único que unirá al Imperio Romano de Occidente y al resto del mundo será la llegada de la gran piedra del sueño de Nabucodonosor, que representa el reino que establecerá Dios mismo. ¿Cuándo sucederá? Mateo 25:31 lo aclara: “Cuando elHijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono de gloria”.

Estamos viviendo en los dedos de la imagen, en “los días de estos reyes” (Daniel 2:44). Ya se ha cumplido todo lo que menciona Daniel 2, con una sola excepción: ¡el regreso de Cristo!.

No sabemos con exactitud cuándo va a venir, pero sabemos que se está acercando. Eso nos lleva a una pregunta importante: ¿Estás listo para ese acontecimiento glorioso?

Fuente: http://www.estaescrito.org