Los pobladores reciben 50 litros de agua por familia. Dicen que no les alcanza y que bañarse es un lujo.
Un último reporte indica que la grave sequía en la sureña provincia china de Yunnan crece sin detenerse. La población se encuentra en alerta por cientos de ríos y embalses secos, y por la gran extensión de cosecha comprometida. Millones de campesinos están experimentando escasez de agua sin precedentes.
El último reporte fechado el 29 de febrero en la ciudad de Kunming, efectuado para la última reunión sobre las medidas de combate de los efectos de la sequía, destaca que todas las 112 estaciones meteorológicas denuncian una «sequía récord de Yunnan«, de distinta intensidad.
El vicegobernador provincial, Chuichzhu Kun, dijo que como resultado de tres años de sequía en la provincia, 273 ríos están completamente secos al igual que 413 pequeños embalses. Además, la sequía ha destruido los cultivos en cerca de 62.480 hectáreas. La mayor parte corresponde a cultivos de trigo.
La provincia de Yunnan es uno de los mayores fabricantes de la caña de azúcar en China. En la actualidad, aproximadamente, el 90% de las 315.000 hectáreas se vieron influenciadas por este fenómeno climático, y se asume que la cosecha será menor en 1,5 millones de toneladas.
En las charcas también se detectó, con alarma, que están aumentando las concentraciones de diversos contaminantes provenientes de los vertederos. Por esta razón en el campo, para obtener una buena cosecha los agricultores usan ahora un gran número de sustancias químicas.
De acuerdo con cifras oficiales al final de 2010, en la provincia de Yunnan no existía el acceso a agua potable a 12,4 millones de agricultores, 75% de los cuales viven en las zonas montañosas.
Meteorólogos locales informaron que, en marzo y abril, no se esperan significativas precipitaciones en la provincia.
En la actualidad las reservas de agua de Yunnan suman 4,3 millones de metros cúbicos, lo que significa 1,77 millones de metros cúbicos menos que en el último año.
Muchos residentes de las aldeas tienen que desplazarse en busca de agua, hasta entre 8 a 10 km., y en algunas zonas de montaña donde no hay agua, ocasionalmente, se les ve llevarla en cantidades muy limitadas.
Un residente del condado, con el nombre de Juan Lulyan, dijo aLa Gran Época que el agua es llevada una vez por semana a razón de 50 litros por familia. «Esta agua es muy poca, tenemos que utilizar la misma agua una y otra vez para diferentes propósitos. El baño para nosotros siempre ha sido un lujo. No me he lavado durante dos meses», declara Juan.
En el pueblo de Fuzhun, más de un millar de campesinos buscaron agua retenida en las montañas durante cuatro días. Como resultado, se las arreglaron para encontrar al menos una fuente.
Después de eso, formaron la «Asociación para el uso del agua», con el fin de economizar en el uso de esta fuente, para que dure un largo tiempo. Según los agricultores, el gobierno no puede resolver el problema de la sequía, por lo que solo hay que esperar «lluvia de verano».
Fuente: http://www.lagranepoca.com
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